Otra forma de eliminar el estrés es aprender de ti mismo e identificando que es lo que necesitas cambiar en una situación estresante para reprogramar tu mente con base en la repetición.
Situaciones de estrés son inevitables en nuestra vida. En este ejercicio debes darte cuenta, desde otra posición, qué es lo que te conviene hacer cuando estás pasando por situaciones estresantes. La idea es que recibas un consejo de cómo resolver esas situaciones, sólo que el consejo lo generarás tú mismo mediante herramientas de PNL.
Requisitos: se requiere un acompañante y para este ejercicio necesitas un lugar donde puedas dar un paso en cualquier dirección. Necesitas tres cartulinas de ¼ de pliego o en su defecto hojas de papel y un marcador.
Recomendación: se requiere que lo hagas de pie, que leas primero el ejercicio para entenderlo y que el acompañante lea lentamente los pasos. Debes además contestar las preguntas que el acompañante te va haciendo de acuerdo a lo que en ese momento estés sintiendo.
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Sigue estos pasos:
1. Visualiza en el piso tres espacios y escribe tres rótulos con los nombres «presente», «neutral» y «observador»,y colócalos en el piso en su lugar correspondiente.
Uno es tu presente estresante donde vives la situación poco placentera con todas sus emociones y matices.
- El segundo es para soltar la negatividad, lo llamaremos «neutral».
- El tercero te conviertes en un observador de ti mismo.
Una vez que tengas ubicados los tres espacios, iniciamos el ejercicio.
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2. Ahora quiero que pises tu presente. Cierra los ojos. Éste es tu aquí y ahora.Aquí es donde vives la situación de estrés. Respira profundamente y visualiza dónde estás, ¿qué haces?, ¿cómo te sientes?, ¿te duele algo?, ¿qué te dices?, ¿quién está contigo?Contesta mentalmente con calma y honestidad cada una de estas preguntas. Nadie te está escuchando sino tú mismo. Puedes decirla verdad de todo lo que te molesta. Quizá sea una situación repetitiva en tu vida y cada vez te molesta más. Date cuenta de tus sensaciones en este momento.
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3. Ahora quiero que abras los ojos, des un paso fuera de ese espacio y te metas al neutral. En este espacio quiero que sacudas los hombros, los brazos, tu cuerpo en general, como si estuvieras cubierto de polvo. Sacúdete la energía negativa que te Suéltala en ese espacio neutral, siente cómo cae al piso. Límpiate de todo lo que ya no quieres tener. Toma el tiempo que necesites. Cuando estés listo toma una respiración profunda para armonizarte.
Ahora camina al espacio donde te conviertes en observador. Respira profundo y cierra los ojos. Desde ahí puedes verte a ti mismo en el espacio de tu presente, batallando con el estrés. Te ves a distancia, desde otra óptica. Desde allí, responde en voz alta ¿qué le aconsejarías a ese yo que la está pasando mal en esta situación? ¿Qué podría hacer diferente? ¿Qué recurso (paciencia, calma, perseverancia, relajación, seguridad, control, etc.) necesita? Piensa qué le aconsejarías a tu yo, piénsalo bien por un momento, y elige los RECURSOS necesarios para ayudarlo.
Recuerda que todos tenemos RECURSOS. Algunos los tenemos olvidados, otros guardados. Date un momento para pensar y buscar RECURSOS para llevárselos a tu yo que los necesita. Cuando los tengas, respira profundamente y abre los ojos.
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4. Regresa al espacio de tu presente con esos RECURSOS y esa ayuda. Respira profundo y cierra los ojos. Ahora te enfrentas a la situación estresante, pero esta vez tienes los RECURSOS y la ayuda necesaria. Actúas y reaccionas diferente porque tienes herramientas nuevas que te ayudan y te protegen. Te sientes diferente, más ligero y con todas las capacidades para enfrentar cualquier situación.
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5. Responde en voz alta. ¿Cómo se modificó la escena? ¿Cómo te sientes ahora? ¿Es bueno para ti? ¿Crees que la siguiente vez que te enfrentes a una situación similar acudirás a este sabio consejo de tu propio yo? Respira profundamente abre los ojos y sal de ese espacio.
Tarea: este ejercicio lo puedes repetir cuantas veces lo necesites, y modificarlo si las situaciones van cambiando. Aquí tienes la base. Después de varias veces podrás hacerlo sin guía ni acompañante.
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