Hay días en los que nos despertamos con el pie izquierdo y deseamos que el día acabe en ese mismo momento, no tenemos ánimos suficientes para comenzar la rutina ni mucho menos energía que aguante un largo día. Hay otros días en los que nos sentimos llenos de alegría y con ganas de comernos al mundo, pero de la nada y sin previo aviso llegan a tu mente pensamientos que rompen esa energía, pensamientos negativos que hace tanto ruido en tu cabeza que te cuesta concentrarte en lo que venías haciendo. ¿También te ha pasado?
Algunas características de los pensamientos negativos son:
- Son mensajes muy específicos que podemos reconocer por ser frases relativamente cortas que se repiten varias veces en nuestra cabeza en forma de reproches, recuerdos o suposiciones.
- Invaden nuestra mente de forma abrupta que no nos dan tiempo de cuestionarlos y creemos que lo que expresan estos pensamientos es la verdad absoluta, dando por cierto algo que en realidad no lo es.
- Los pensamientos negativos solo nos muestran un unto de vista irreflexivo y sin gran profundidad en sus argumentos.
Los 5 pensamientos negativos más comunes:
- Creer que solo hay dos tonos, blanco o negro.
- Minimizar las cosas buenas de ciertas situaciones.
- Creer que por una mala experiencia del pasado, próximas situaciones siempre van a ser así.
- Suponer lo que otras personas estén pensando.
- Responsabilizarnos de lo que ocurre todo el tiempo, incluso cuando no hemos hacho nada.
Estrategias para desactivar los pensamientos negativos:
- Observar nuestro pensamiento, no te juzgues, entra en el papel de observador, intenta visualizar a aquellos pensamientos que interrumpen en tu día sin aviso y déjalos ir sin implicarte emocionalmente con ellos.
- Replantear nuestras ideas, despeja tu mente de los diversos pensamientos que la ocupan y le dificultan pesar con claridad, no te sorprendas si al final encuentras que no hay ningún problema, pues significa que solo era tu mente sesgada por pensamientos sin mucho sentido.
- Evitar los posibles disparadores de pensamientos negativos, estos pueden ser una canción, una persona, una fotografía o incluso un libro. Sustitúyelos por otros detonantes, pero esta vez, que generen estímulos agradables en ti, no castigues a tu mente.
- Entrar en movimiento, cuando tu mente este atrapada por pensamientos negativos busca la forma de ocupar a tu cuerpo en actividades físicas como, caminar, hacer ejercicio o incluso bailar y de esta manera tu mente podrá reaccionar a esas ideas que la atrapan.
- Cambia ese pensamiento negativo por afirmaciones positivas, adquiere el hábito de pensar positivamente en momentos en los que tu mente está confundida por ideas negativas ya que por lo general suelen ser hábitos aprendidos.
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